Hay personas que se han vacunado, se prueban varias veces a la semana, por miedo.
Hay personas que están vacunadas y no saben si hicieron lo correcto.
Hay personas que TIENEN MIEDO de la vacunación y, por lo tanto, aún no la han recibido.
Hay personas que no quieren vacunarse por tercera vez por MIEDO.
Hay personas que se vacunan por tercera vez por MIEDO.
Hay personas que tienen MIEDO por sus hijos y por eso los vacunan.
Hay personas que tienen MIEDO por sus hijos y que no quieren que se vacunen por eso.
Hay personas que están paralizadas por el MIEDO y enferman mentalmente.
TODOS tienen una cosa en común: ¡MIEDO!
Nunca se sabe de qué MIEDO actuó así su contraparte.
La próxima vez que te enfrentes a una persona, hazte consciente de que actuó como tú, por MIEDO, incluso si esto se manifiesta de diferentes maneras.
Haz que tu AMOR sea infinitamente grande y sal de la posición de juicio, eso abre otro espacio para la acción y finalmente te libera (evaluación).
Porque lo que percibes en verdad es simplemente tu MIEDO y su MIEDO que se encuentran.
Si se da cuenta de ello y puede reconocerlo, podrá actuar en consecuencia de manera diferente.
Si haces que tu AMOR sea tan grande en este momento, podrás volver a tener comprensión y compasión por tus semejantes.
Esta es la forma del AMOR, que debería recordarnos que tendríamos suficiente para dar si lo permitimos.
Contra la división. Por la unión ...